Su sitio web debe contar una historia que atraiga la atención de su visitante y luego lo guíe a través de su mejor secuencia de ventas para convencerlo de que usted tiene la mejor solución.
Su visitante llega a su sitio web en busca de respuestas y soluciones a un problema que tiene. Su sitio web debe contar su historia de manera que atraiga e interese a sus clientes potenciales.
Cómo crear su mensaje
¿A quién le vende? Puede tener varios públicos, señala la agencia de publicidad Andar. Por ejemplo, un sitio web de empleo atrae tanto a personas que buscan trabajo como a empleadores que buscan contratar. Cada uno de ellos necesitará su propia vía de acceso a la audiencia con su propio mensaje, proceso de venta y sección de su sitio web.
Cree un plan: Empieza por crear un esquema de los pasos (páginas) que sigues de forma natural en las ventas cara a cara. Cómo va a captar su atención, conseguir su interés, crear deseo y hacer que pasen a la acción. Haz un guión gráfico de tu proceso y utilízalo como mensaje y luego como plan de contenidos.
Diferénciese: ¿Qué es lo que le diferencia a usted o a sus productos de la competencia? Asegúrese de presentar su propuesta de venta única.
Comprueba tu plan: ¿Consigue interesar a los clientes potenciales? ¿Les motiva a pasar a la acción? ¿Tiene elementos educativos en los que puedan aprender a aplicar lo que vendes? Si no los tiene, actualícelos y cambie su plan.
Comience con los titulares: La gente escanea una página cuando llega por primera vez. ¿Los titulares comunicarán la esencia de su oferta? La bienvenida en su titular puede mostrar hospitalidad, pero no tiene poder de mensajería. Cree titulares y subtitulares que cuenten su historia de un solo vistazo.
Palabras clave: Utilice palabras clave en los titulares. Los buscadores las utilizaron para encontrarle, ahora esperan verlas cuando llegan por primera vez.
Escriba el contenido: Cree el contenido de su web de manera que sea corto y dulce. Evite los bloques pesados de texto en párrafos. Cree contenidos que puedan ser fácilmente escaneados utilizando llamadas de texto en negrita y listas con viñetas. Su contenido debe centrarse en los beneficios y no en las características.
Su contenido debe fluir como una historia bien orquestada. Debe educar y convencer y, a continuación, incitar a la acción. El lector debe ser capaz de entender la esencia de su historia escaneando cada página en 1 o 2 segundos. Este es el arte de la mensajería.