Los SUV están de moda, y los de motor grande cada vez más. Tras el Jaguar F-Pace SVR, es el turno de Maserati de desatar un Levante furioso en el Salón de Nueva York.
El nuevo monstruo de Módena se ofrecerá inicialmente en una edición limitada «Launch Edition» (que también está en el aire) para nuestros amigos del otro lado del Atlántico y se comercializará a partir del verano de 2018.
El corazón de las modificaciones está, obviamente, en el motor: un 3,8 litros biturbo que, con toda probabilidad, procede directamente de debajo del capó del Ferrari Portofino… sería una pena privarse de los motoristas de Maranello a la hora de proponer una versión deportiva de un Maserati. La marca aún tenía que adaptarlo al sistema de tracción total Q4 que no tiene el primo rojo. 600 caballos de potencia, 730 Nm de par, mover las más de 2 toneladas debería ser fácil. Con 3,6 kg por caballo, el 0 a 100 se alcanzará en 3,9 segundos y se superarán los 300 km/h de velocidad punta.
Maserati se ha labrado en los últimos años una halagadora reputación por el sonido de sus escapes, y es seguro que con un coche de este tamaño, lo oirás desde lejos, y te sorprenderá ver un coche de esta talla en lugar de un GT grande y afilado… funciona siempre.
El chasis también se ha adaptado a la nueva potencia del SUV para garantizar una conducción deportiva preservando un confort aceptable para los pasajeros, según los responsables de la marca. Lógicamente, la vocación familiar del coche no podía ignorarse totalmente. Se añade un modo Corsa a la gama de modos de conducción, por si surge la necesidad de buscarle las cosquillas a un Lotus Elise. Nadie habla de capacidad todoterreno, pero ¿realmente es eso lo importante a la hora de presentar un 4×4?
El estilo interior se mantiene cercano al original, resaltado en esta versión por las costuras rojas (que ayudan a aumentar la velocidad máxima). Si quieres ir aún más rápido, también está disponible un interior completamente rojo. Queda muy bien con la carrocería negra. El reloj Maserati del salpicadero sigue ahí, la tradición continúa.
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Para el estilo exterior, se utilizan las recetas habituales: un parachoques abierto muy grande, branquias en el capó, una parrilla negra y unas enormes y nuevas llantas «Orione» de 22 pulgadas. La lograda línea del SUV es más musculosa y se afirma su carácter deportivo.
El Levante ya era uno de los SUV más atractivos del mercado, y esta versión de altas prestaciones no hace sino aumentar su sex-appeal y parece que será todo un éxito. Pero cuidado, la competencia es dura en este segmento: Mercedes AMG GLE 63, BMW X5M, el flamante Bentley Bentayga V8, el Jeep Cherokee SRT8, el Range Rover Sport SVR, el Alfa Romeo Stelvio QV, la lista es muy muy larga….
Argumentos no le faltan a la nueva estrella italiana.
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